La Cámara de Diputados inició este lunes el debate de la nueva “Ley de Bases y Puntos de Partida” que negoció en su totalidad con los bloques de la oposición más cercanos al gobierno nacional durante más de un mes, tras el gigantesco fracaso de febrero de la “Ley Ómnibus”.
El presidente Javier Milei buscará anotarse su primer triunfo legislativo en una sesión maratónica que, se presume, durará más de 30 horas y terminará recién a la madrugada: se debatirán puntos álgidos como la nueva y polémica reforma laboral en ciernes, el desmantelamiento de las instituciones científicas nacionales, un importante apartado fiscal, darle facultades delegadas al presidente, desregular la economía, privatizar empresas públicas restituir el impuesto a las ganancias y también la extranjerización de las tierras, entre otras cuestiones sensibles.
Ante este panorama, las inmediaciones del Congreso de la Nación amanecieron plagadas de efectivos, camionetas y camiones de la Policía Federal y de Gendarmería.
El operativo de seguridad se llevará adelante mientras se desarrolle en la Cámara Baja el tratamiento del proyecto de ley y la propia titular del Ministerio de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, confirmó que están decididos a implementar el “protocolo anti-piquetes” en caso de que haya manifestaciones en contra de lo que se vote.
“Hoy frente al Congreso, y más frente al Congreso donde hemos tenido malas experiencias, vamos con el ‘protocolo anti-piquetes’ con toda su dimensión“, sentenció la funcionaria nacional en diálogo con A24.
