Después de semanas de idas y vueltas, frenos en las negociaciones y advertencias sobre medidas de fuerza, finalmente un acuerdo parcial alcanzado en la tarde de este último miércoles entre los directivos de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y las cámaras empresarias del autotransporte de pasajeros desactivó el paro previsto para las próximas horas.
En primera instancia, las partes patearon la pelota para adelante: acordaron el pago de una suma fija de 250 mil pesos el próximo 15 de mayo y un segundo desembolso similar el 14 de junio de las empresas en favor de cada uno de los choferes, con carácter “no remunerativo”.
Mientras tanto, seguirá la discusión de fondo en torno a la recomposición salarial: el salario básico de los choferes de líneas de colectivos sigue establecido en 737 mil pesos, tal como fuera resuelto en el convenio firmado para el mes de febrero, pero a los trabajadores no les cierra y los empresarios no quieren dar el brazo a torcer.
En el medio, la Secretaría de Transporte de la Nación no está dispuesta a desembolsar más dinero: solo autoriza a pagar esa última suma como sueldo contemplado en los subsidios que el Tesoro le deposita a las empresas, por lo que la brecha entre lo que exigen y los subsidios deberían cubrirlos los dueños de las empresas.
