El gobierno de Javier Milei sufrió este jueves un gran revés político, el segundo que cosecha en el Congreso de la Nación tras la caída de la “Ley Ómnibus”: una mayoría amplia en el Senado se impuso para forzar el tratamiento del “mega DNU” y luego lo rechazó casi por paliza: fueron 42 votos en contra del DNU 70/2023, apenas 25 a favor y 4 abstenciones.
¿Quiénes rechazaron convalidar el “decretazo”? La chubutense Edith Terenzi, que responde al gobernador de Juntos por el Cambio, Ignacio Torres; los santacruceños José María Carambia y Natalia Gadano; Lucila Crexell, del Movimiento Popular Neuquino; y de Mónica Silva, de Juntos Somos Rio Negro, el partido del gobernador Alberto Weretilnek. Por otro lado, también aportaron su negativa los radicales Martín Lousteau y el fueguino Pablo Blanco, presidente del bloque de la Unión Cívica Radical (UCR). A éstos se le sumaron, por supuesto, los 33 senadores de Unión por la Patria, más otros dos del peronismo federal, Edgardo Kueider y Carlos Espínola.
Los misioneros Carlos Arce y Sonia Rojas, y la cordobesa Alejandra Vigo, optaron por la abstención, lo mismo que el ex bullrichista Maximiliano Abad.
¿Qué pasará ahora con el “mega DNU”? Sigue en pie al menos hasta que la Cámara de Diputados lo trate. Recién ahí, y en caso de rechazarlo los legisladores, entonces sí quedaría derogado y sin efecto.