Según los datos que surgen del relevamiento difundido por la Dirección General de Estadística y Censos (DGEyC), una familia tipo en la Ciudad de Buenos Aires necesitó el mes pasado percibir ingresos de por lo menos $1.017.520 para ser considerada de clase media.
En tanto, indicaron que la misma familia debió ganar al menos $684.115,30 para no quedar bajo la línea de pobreza y que, para no ser indigente, fueron necesarios por lo menos $402.752 mensuales.
Vale la pena recordar que en el análisis de los datos y las variables que lleva a cabo el organismo estadístico porteño está incluido el supuesto según el cual la familia tipo definida en el informe es propietaria del inmueble en el que vive: esto implica que, si la persona es inquilina, debe sumarle a esa cifra un extra nada despreciable de dinero.
Por otra parte, detallaron que los gastos de la canasta básica alimentaria (CBA), que marcan el límite de la indigencia, tuvieron un aumento del casi 14,88% respecto a enero, cifra que se ubicó incluso por encima de la inflación del período. Y, en lo que respecta a la canasta básica total (CBT), cuyo valor marca la línea de pobreza, el incremento mensual fue también del 14,88%.