Pasada la visita del presidente Javier Milei al Foro Económico Mundial de Davos y con la “Ley Ómnibus” discutida y negociada en los pasillos del Congreso de la Nación, el gobierno nacional empieza a apuntar sus cañones contra el paro convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT) del próximo miércoles 24 de enero.
En este contexto, el vocero presidencial Manuel Adorni confirmó este jueves que se le descontará de sus salarios el día no trabajado a los empleados estatales nacionales que adhieran a la medida de fuerza.
“Se ha tomado la decisión de descontar el salario a todos los empleados estatales nacionales que adhieran a la medida. El salario es una contraprestación y quien no trabaje, es razonable que no cobre. Seguimos esperando los argumentos de por qué del paro, que no termina de quedar claro”, afirmó en su habitual conferencia de prensa en Casa Rosada.
“Recordamos que está abierta la línea 134 para que todos aquellos que se sientan amenazados, extorsionados o en alguna situación que los hagan sentirse obligados a parar, puedan hacer la denuncia anónima“, informó luego.
Y remató: “La Argentina está en una situación de urgencia, el cambio es necesario para sacarla de la decadencia. No existe razón para el paro o, al menos, las explicaciones de los porqués son casi infantiles“.