El último informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (UCA) presentó los resultados socioeconómicos de las últimas dos décadas y números más que preocupantes.
Según la última medición, la pobreza se ubicó en el 44,7% en tercer trimestre del año, una cifra similar a la del 2020 y la más alta desde 2006, cuando fue del 41,2%.
Si se mira la pobreza desde una óptica multidimensional, los investigadores de dicha universidad concluyeron que el 67% de la población al menos sufre una carencia.
“El costo económico de los programas sociales sigue siendo muy bajo desde el punto de vista del PBI. No es la forma en que se pueda salir de la pobreza de ninguna manera y de hecho cristaliza una especie de economía y una cultura de la informalidad, pero cuando no hay empleos formales ni hay demanda agregada de empleo para que se ocupen puestos de trabajo, estos planes permiten la subsistencia de los sectores excluidos“, aseveró Agustín Salvia, director del Observatorio de la Deuda Social.
“La inseguridad alimentaria severa –esto significa, gente que directamente no come– es del 27,1%, el nivel más alto desde 2004 salvo el pico del 36% de la pandemia“, prosiguió en diálogo con distintos medios. Y agregó: “La pregunta no es cómo llegamos a una pobreza de más del 40%, sino cómo no fue superior en un contexto de caída de salarios, empleo y crecimiento”.
“Va a seguir aumentando la pobreza. No de manera explosiva, sino igual que lo que pasó en estos años de entre uno a tres puntos“, concluyó el sociólogo e investigador.