Los grandes perdedores de estas elecciones fueron, sin lugar a dudas, los integrantes de Juntos por el Cambio: la coalición, que pintaba a principios de año para consolidarse como la primera fuerza del país, se fue deshilachando con peleas internas hasta quedar en estas elecciones generales en el tercer lugar, fuera del balotaje y al borde de la desintegración.
Casi una hora más tarde de que se conocieran los primeros resultados oficiales de las elecciones presidenciales, la candidata a presidente, Patricia Bullrich, reconoció la derrota en los comicios al cosechar el 23,82% de los votos: “No hemos logrado los objetivos que queríamos para nuestra Argentina. Nuestra causa va más allá de un momento electoral y va más allá de una derrota”.
“Hoy lo aceptamos, pero tenemos una convicción profunda de los valores que llevamos dentro, de la república, de la transparencia, de los valores de lucha, de la corrupción. Quizás esos valores hoy quedaron dormidos, pero nosotros los vamos a despertar todos y cada uno de los días de nuestra lucha para lograr una Argentina productiva y sin pobreza”, explicó.
Y, en lo que pareció un guiño para con La Libertad Avanza a pesar de las barbaridades que Javier Milei dijo sobre su persona y la de Horacio Rodríguez Larreta, señaló: “Nunca vamos a ser cómplices del populismo de la Argentina y nunca vamos a ser cómplices de las mafias que destruyeron este país. El populismo ha empobrecido al país y no soy yo quien va a felicitar a quien vuelva al poder tras haber sido parte del peor gobierno de la historia argentina. Solo lo que hicieron en el último tiempo, repartiendo plata, hundieron el futuro del país y de los argentinos”.
“Hemos tenido buenos y malos momentos, pero jamás vamos a dejar de ser lo que somos para la Argentina. Quiero decirles que todos los que somos parte de esta fuerza vamos a representar los valores de los que hoy nos votaron y de muchos argentinos que quizás en el corto plazo vuelvan”, concluyó.
