Una vez más, las noticias no son buenas para los argentinos y las argentinas que alquilan ya que a la cuestionada “Ley de Alquileres” -que hasta el momento ha demostrado tener algunas ventajas y otros aspectos bastante perjudiciales para los alquilinos- se le sumó ahora un nuevo dolor de cabeza: el proyecto de reforma que tuvo este miércoles media sanción de la Cámara de Diputados por parte de la oposición, fundamentalmente de Juntos por el Cambio.
La misma introduce cambios en los aspectos principales de la norma, muchos de los cuales habían sido reclamados a los legisladores por las entidades y grandes grupos inmobiliarios por sobre la opinión de las agrupaciones de inquilinos.
¿Cuáles son las modificaciones más importantes?
Por un lado, la reducción de tres a dos años en el plazo de vigencia de los contratos pactados entre los propietarios de las viviendas y los inquilinos.
Por el otro, un cambio clave en la forma en que se actualiza el monto a pagar, que dejará de ser anual para efectuarse dentro de un plazo de entre cuatro y doce meses.
Como si esto fuera poco, los propietarios y los inquilinos deberán convenir “por su cuenta” el mecanismo de actualización del precio del alquiler. ¿Qué quiere decir esto? Que deberán elegir entre las siguientes variables: el Índice de Precios al Consumidor (IPC); el índice de Precios Mayoristas (IPM); el índice de Salarios (IS) o una combinación de algunos de los índices citados. Hasta ahora, las actualizaciones anuales de los contratos se concretan a partir del Índice de Contrato de Locación (ICL), un coeficiente que elabora el Banco Central (BCRA) tomando como referencia el IPC del Indec y la Remuneración imponible promedio de los trabajadores estables (RIPTE).
“Esto desprotege el salario de los inquilinos y resguarda la rentabilidad de los dueños de las viviendas en alquiler en la Argentina. Es una modificación a favor de que aumenten los alquileres como quiere el mercado inmobiliario. A quienes alquilamos nos conviene una actualización anual y no que nos aumenten el alquiler cada cuatro meses según la inflación como se votó“, sentenció Gervasio Muñoz, referente de la organización Inquilinos Agrupados.
“El mercado ha llevado adelante un ataque muy fuerte y coordinado de incumplimiento de la ley, un golpe de mercado sacando las viviendas en oferta y dolarizando los alquileres”, remató.
Vale la pena resaltar que la reforma del proyecto de ley debe pasar todavía por el Senado, donde ni en comisiones ni en el recinto la oposición cuenta con mayoría para sacarla adelante con facilidad.