“Es una elección muy difícil para todas las fuerzas políticas. Para oposición y para oficialismo no está siendo una elección sencilla. Tiene bastantes particularidades. El hecho de que Macri renunciara a su candidatura, que lo hizo porque no tenía votos, y el hecho de que Cristina esté proscripta y perseguida judicialmente son dos cuestiones centrales para comprender lo extraña y particular que es la elección”, aseveró Axel Kicillof en una entrevista con Infobae.
“Tuvimos que construir una propuesta electoral donde muchos decían ‘ahora se va a romper el frente por las discusiones y diferencias que tienen’; sin embargo llegamos unificado, con una propuesta consensuada y con una campaña que además es propositiva y colaborativa aún en los lugares donde tenemos interna”, explicó el actual gobernador bonaerense que irá en busca de la reelección.
En esta línea, y en torno a las ocasiones en las que se mostró junto a Sergio Massa y luego con Juan Grabois, ambos precandidatos presidenciales, señaló: “Nadie oculta ni pretende ocultar que hay matices distintos, que hay posiciones a veces distintas en el marco de un frente en donde por un lado tenemos propósitos, prioridades, objetivos iguales: somos una fuerza en el campo popular que quiere el desarrollo nacional, con la inclusión social, la ampliación de derechos que hace eje como factor de integración social y de administración social, al trabajo y la producción argentina que defiende la soberanía nacional”.
Específicamente sobre la disputa en la Provincia de Buenos Aires y el desarrollo de la campaña, subrayó: “Tenemos la responsabilidad del gobierno de la provincia y podríamos mostrar la gestión y listo, pero tenemos una dificultad, un obstáculo, para comunicar los resultados de esa gestión que tiene que ver con algo similar a lo que ocurría en el macrismo pero al revés. A Vidal la acompañaba un sistema mediático diciendo que la provincia estaba muy bien y que todo era un paraíso y en la realidad se veía otra cosa. Tuvimos que hacer un esfuerzo no solo para hacer sino para comunicar lo que hacíamos con carácter general. Hay una inclinación a mostrar las cosas que andan mal, no andan o todavía no están resueltas en la provincia, que es tan fuerte, y tan poderosa como la inclinación por no mostrar lo que sí se hace y lo que funciona mejor“.
Por último, se refirió a las idas y vueltas en las negociaciones y los desembolsos con el Fondo Monetario Internacional (FMI): “Estamos bajo un programa que no contribuye a la recuperación salarial. Ni el Estado, ni el privado porque incluso algunos elementos de política económica que están contenidos en el programa como por ejemplo obligar a que la tasa de devaluación supere siempre el movimiento de los precios y que la tasa de interés esté por encima siempre de la inflación. Son dos medidas que siempre recomienda el Fondo y son inflacionarias. Es un círculo vicioso”.
“Tienen un librito de recetas que tratan de aplicar en todos los países como si fueran lo mismo y no es así. Siempre se equivocan pero para el mismo lado. Eran muy pesimistas cuando gobernaba el kirchnerismo y cuando gobernaba Macri siempre la economía crecía menos que lo que el fondo pronosticaba. Me parece que hay recetas del fondo que no son útiles para la Argentina. Es relevante porque condicionan los desembolsos”, remató.