“En el marco de una presencia masiva de personas frente al domicilio de la vicepresidenta, un hombre apuntó con un arma de fuego a su cabeza y gatilló. Cristina permanece con vida porque, por una razón todavía no confirmada técnicamente, el arma que contaba con cinco balas no se disparó pese a haber sido gatillada“, señaló Alberto Fernández en un mensaje por cadena nacional leído antes de la medianoche desde la Quinta de Olivos.
“Este atentado merece el más enérgico repudio de toda la sociedad argentina, de todos los sectores políticos y todos los hombres y las mujeres de la república, porque estos hechos afectan nuestra democracia. Estamos obligados a recuperar la convivencia democrática que se ha quebrado por el discurso del odio que se ha esparcido desde diferentes espacios políticos, judiciales y mediáticos de la sociedad argentina”, prosiguió.
“Estamos ante un hecho que tiene una gravedad institucional y humana extrema. Se ha atentado contra nuestra vicepresidenta y la paz social ha sido alterada. La Argentina no puede perder ni un minuto más. Ya no hay tiempo. Es necesario desterrar la violencia y el odio del discurso político y mediático y de nuestra vida en sociedad”, subrayó luego el mandatario.
En esta línea, informó que se comunicó con la jueza que está investigando lo ocurrido y le solicitó “que esclarezca rápidamente las responsabilidades y los hechos”: “También le he solicitado que asegure la vida del acusado directo que se encuentra detenido”.
“Convoco a todos y a cada uno de los argentinos y argentinas, a toda la dirigencia política y social, a los medios de comunicación y a la sociedad en general, a rechazar cualquier forma de violencia. Necesitamos aislar, no convalidar y repudiar las palabras descalificadoras, estigmatizantes y ofensivas que solo nos dividen y enfrentan. Que la conmoción, el horror y el repudio que este hecho nos genera se conviertan en un compromiso permanente para erradicar el odio y la violencia de la vida en democracia”, concluyó.