“Yo escuché todos los insultos, lo dijeron los policías de mayor edad. Pero a mi no me gusta victimizarme. Fue un video de la propia policía el que apareció, se ve que el policía quiso hacer una demostración y el video se le filtró pero de nuestra parte no hubo una intención nuestra en mostrar”, aseveró en una entrevista con El Destape Radio.
“Cuando llegamos al cordón policial, la idea era entrar despacito, pero hubo un par que se sacaron. Yo les vi la cara. No tenía sentido lo que hicieron. Empezaron a insultarme y hubo un intercambio de insultos salvo con uno, que tenía mayor rango y que fue muy gentil pero no podía parar a los propios“, agregó.
Y en relación con la actitud de la dirigencia de Juntos por el Cambio y el envío de policías a Recoleta durante el fin de semana por parte del gobierno porteño, subrayó: “Son violentos porque no tienen mucho para proponer. Tienen un discurso denigrante y estigmatizante a quienes no pertenecen a su clase social. Están viendo quién mata al primer peronista, quién golpea a los pibes, quien saca chapa de cowboy“.
“Si esto sigue así va a terminar mal para las fuerzas de seguridad, porque cuando la dirigencia juega a los cowboy termina mal para los policías, que van presos. Tendrán que revisar las fuerzas de seguridad a qué están dispuestas o no por esta construcción de poder de las elites argentinas”, remató.
Sobre el jefe de gobierno porteño, señaló: “En un intento de sobreactuar y querer dar una imagen a sus votantes, tuvo la buena idea de poner vallas para congraciarse con Mauricio Macri y demostrar a Patricia Bullrich que es más duro que ella. Larreta generó la movilización”.
Por último – y tras asegurar que tiene “sensaciones encontradas” en torno a una posible candidatura de su mamá, Cristina Fernández de Kirchner, a la presidencia en 2023 aunque afirma que “es la mejor” para hacerlo- habló sobre la crisis económica que atraviesa la Argentina y los recientes cambios en el Palacio de Hacienda: “Lo de Guzmán fue un desastre, fue malo y no tengo problemas en decirlo. El FMI se lavó la cara y al jabón y al agua lo pusimos los argentinos. Desde el Fondo nos prometen el infierno, hay que decírselos a los argentinos y argentinas. Tenemos que ver por dónde salimos y entender qué es bueno para nuestro país”.
