A pesar de que el gobierno nacional inició negociaciones a contrarreloj para alcanzar una solución, los hospitales, clínicas, sanatorios, servicios de emergencia, geriátricos y otros establecimientos enrolados en la Federación de Prestadores de Salud (FAPS) anunciaron que volverán a cobrar copagos a los pacientes de empresas de medicina prepaga y obras sociales de dirección.
Según informaron a la prensa, el valor prepago por la atención será del 9% del valor de cada prestación que sea requerida por los pacientes y regirá a partir del 1 de enero próximo: la medida impactará en quienes tengan Cemic, Femedica, Galeno, Medife, Swiss Medical, Medicus, Omint, OSDE y la Obra Social Luis Pasteur.
Las prestadoras subrayaron que tienen que tomar la medida ante “el incumplimiento de las empresas de medicina prepaga y Obras Sociales de Dirección, que las obliga a buscar alternativas para evitar un colapso de sus finanzas y a su vez financiar el pago de salarios de su personal”.
“Se va a cobrar un 9% sobre todo lo que se haga el paciente; por ejemplo, por hacerse un laboratorio que vale $5.000, va a tener que pagar 450 pesos. Esto no es una amenaza para que nos permitan aumentar, es un hecho, salvo que haya un cambio que nos cubra la financiación”, explicó Marcelo Kaufman, presidente de CEDIM.
Desde el Ministerio de Salud de la Nación informaron que convocaron a una reunión de emergencia para este días lunes con la intención de limitar el impacto de esta resolución en el bolsillo de los pacientes.