Luego de reunir más de 175 mil firmas y tras años de reclamos, finalmente organizaciones sociales alemanas lograron que el mismo día que los berlineses votaban a sus nuevas autoridades también se expresaran sobre un proyecto para expropiar a las inmobiliarias que tuvieran más de 3.000 mil propiedades.
La ciudad de Berlín aprobó un referéndum -que llevó el título “Expropiar a Deutsche Wohnen & Co”– para expropiar al menos 240 mil viviendas para volcarlas al mercado de alquileres y mejorar su oferta: se impuso con el 56% y obtuvo más de un millón de votos.
Aunque el resultado no es vinculante, obliga al senado de la capital alemana a tratar el proyecto y sentar posición sobre un tema sensible teniendo en cuenta que el 80% de los berlineses alquila y la especulación inmobiliaria viene haciendo desaparecer progresivamente los precios accesibles y expulsando a los inquilinos.
En el último tiempo, Berlín compró 14.750 viviendas y 450 locales por 2.500 millones de euros a una de estas principales inmobiliarias y en 2019 ya había hecho lo propio con 6.000 casas pertenecientes a “Aldo Properties“.