A pesar de que en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) el cierre de escuelas y de bares durante nueve días parece haber ayudado con fuerza a la baja de casos, la situación epidemiológica es preocupante a lo largo y a lo ancho del territorio argentino.
Según datos oficiales, trece de las provincias del país tienen sus camas de terapia intensiva con una ocupación superior al 80% y, al ritmo exponencial en el que crecen los contagios, todo indica que la cosa se pondrá peor en las próximas semanas.
Las provincias con la mayor tasa de ocupación de Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) son Río Negro y Santa Fe (97%); Neuquén y Corrientes (91%) y San Juan (90%). Las que le siguen son Formosa, Entre Ríos y Tucumán (87%), Salta (86%), La Pampa y Chaco (83%), Mendoza (81%) y Córdoba (80%).
Hay otras seis provincias que, pese a estar un poquito “mejor”, también tienen la capacidad de camas de terapias en un porcentaje altísimo y con un personal de salud extenuado: Chubut (79%), Catamarca (78%), Ciudad de Buenos Aires y San Luis (76%), La Rioja (73%) y Buenos Aires (72%).
📈 Según un estudio de la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva (SATI), los pacientes graves que ingresan a terapia intensiva son menores de 60 años, de los cuáles el 86% no recibió ninguna dosis de vacuna.