Los números no son buenos, el panorama epidemiológico empeora semana a semana y las autoridades por ahora se muestran reticentes a tomar soluciones de fondo para frenar el crecimiento exponencial de los contagios en el AMBA que amenaza con desbordar el sistema sanitario público y privado.
“Iremos evaluando día a día, semana a semana, si es necesario proponer alguna nueva medida. Al día de hoy creemos que lo que estamos haciendo es la forma de ocuparnos de esta situación“, aseveró este miércoles por la mañana Fernán Quirós en conferencia de prensa.
“Nosotros ya tenemos restricciones que no hemos levantado desde enero, como las restricciones nocturnas“, remarcó el titular del Ministerio de Salud de la Ciudad de Buenos Aires a pesar de que cualquiera que camine por las calles del distrito sabe que tanto bares como boliches funcionan con casi normalidad.
“Las curvas del año pasado con ésta no son comparables porque hoy se reportan muchos más casos y existe una mayor eficiencia del rastreo y testeo. Estamos testeando 3 o 4 veces más que lo que hacíamos el año pasado. Las curvas de casos por día, quizás este año pudiéramos ver números más significativos pero no necesariamente indica que la epidemia está más distribuida”, explicó luego.
Y agregó: “Hasta el día de hoy la mayoría de los casos se han concentrado en grupos de edad más joven, por lo cual hay menos gravedad y menos casos en gente mayor de 60. Hemos tenido muchos casos reportados y no tantos casos de necesidad de camas intensivas“.
“Tenemos que volver a concentrarnos en el cuidado individual cotidiano: usar permanentemente el barbijo, evitar los encuentros en lugares cerrados, encontrarse siempre en espacios abiertos. Y les pedimos a todos los ciudadanos porteños que cuando vuelvan de sus vacaciones de Semana Santa se testeen. Es muy importante que sepan si están enfermos. Hay que hacer un esfuerzo y testearse”, concluyó.