La internación de Diego Armando Maradona el lunes por la tarde/noche en un hospital de La Plata encendió las alarmas: en ese momento solamente se hablaba de “anemia” y “problemas anímicos” del entrenador del “Lobo”. Sin embargo, el martes al mediodía se conoció que el “10” tenía que ser operado por un “hematoma subdural”.
Ayer a la noche, fue intervenido quirúrgicamente “de manera exitosa” en la Clínica Olivos mientras decenas de fanáticos aguardaban en la puerta del lugar, desplegando banderas y pidiendo por su salud.
“Por suerte fue una operación exitosa y ahora esperamos por el período de recuperación. El hematoma se eliminó satisfactoriamente y tal como esperábamos“, aseguró Leopoldo Luque, neurólogo y médico del astro, ante la prensa.
Acompañado por buena parte de sus hijos, familiares y allegados, Maradona seguirá en la clínica -en principio en terapia intensiva– durante los próximos días para evaluar su estado de salud y, obviamente, no podrá dirigir el fin de semana a Gimnasia de La Plata en el partido que debe disputar contra Vélez.
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