En medio de la pandemia de coronavirus y una economía en recesión, los y las trabajadoras de la salud porteños decidieron comenzar un acampe en las puertas de la sede del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires emplazada en el barrio de Parque de los Patricios.
Héctor Ortiz, secretario general de ATE en el Hospital Durán y dirigente del “Frente de Salud Germán Abdala” señaló que el reclamo, en primer lugar, tiene que ver con el histórico pedido de los y las enfermeras de ser considerados profesionales de la salud y no técnicos administrativos.
En esta línea, exigen también un “aumento salarial de emergencia para todos los trabajadores de la salud” y “la renovación de 1.500 contratos originados para enfrentar la pandemia”: “Nos vamos a quedar sin los servicios de enfermería en los hospitales“, advirtió en diálogo con la prensa.
“Cuando hablamos de todos los trabajadores, abarca a enfermeros, técnicos radiólogos y de laboratorio, administrativos, camilleros, choferes de ambulancias y trabajadoras de servicios generales. No puede ser que tengamos sueldos de 30 mil o 32 mil pesos, es una real vergüenza; estamos en una situación angustiante porque comemos o pagamos los impuestos y así no podemos seguir”, remató.
