La situación es de excepción: el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires aseguró en las últimas horas que los casos de coronavirus en Villa Azul “crecen anormalmente” y que, a partir de ello, se justifica la decisión de “cercar” el barrio vulnerable que comparten Avellaneda y Quilmes por 14 días para evitar que el foco de contagio se expanda.
Hasta el momento se detectaron 173 personas con COVID-19, con decenas de resultados todavía por llegar y más de un centenar de vecinos con síntomas compatibles con la enfermedad.
Las 3.000 personas que viven allí vieron entre domingo, lunes y martes desembarcar agentes estatales por doquier: más de un centenar de miembros de la Policía Bonaerense, equipos de la Unidad Táctica que controlan los 20 ingresos al lugar, profesionales de la salud y voluntarios.
Según el personal sanitario que circula por las calles del lugar, los torneos de fútbol relámpago realizados en plena cuarentena habrían agravado el problema: “A nosotros la gente nos dice que el foco de contagio fue un torneo de fútbol que duró toda la madrugada. Y que hubo público, como 200 personas”.
? Carla Vizzotti, secretaria de acceso a la salud: “El índice de positividad en Villa Azul es del 50%”
? Daniel Gollán, ministro de salud bonaerense: “Nuestro equipo de profesionales está dando respuesta integral a todo lo que genera tener una población aislada”
? Nicolás Kreplak, viceministro de salud bonaerense: “Hay alimentos para repartir a todo el barrio. Ya lo hicimos en 600 de las 800 casas. La lentitud y la tardanza tiene que ver con el armado y la logística de los bolsones, pero hay para todos”
? La cancha de fútbol desde el aire: allí se habría realizado el “torneo relámpago” que disparó la cantidad de contagios en Villa Azul
