El crecimiento exponencial de casos confirmados de coronavirus en las villas y asentamientos de la Ciudad de Buenos Aires se materializa día a día en la cifra de contagiados. Según datos oficiales, el martes eran 249: ahora son 365.
De acuerdo a las autoridades sanitarias, de los 84 casos nuevos registrados este último miércoles en territorio porteño, 64 correspondían a personas que viven en zonas vulnerables.
En la habitual conferencia de prensa matutina, la titular de la Secretaría de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, ponderó los operativos conjuntos con el gobierno porteño para detectar de manera precoz, casa por casa, los casos positivos: “Están dando resultado para aislar a los pacientes y se va a mantener”.
Distintas organizaciones sociales y políticas venían advirtiendo de la precaria situación que se vivía en los barrios más empobrecidos de la Capital Federal y el potencial riesgo que implicaba estar hacinados, en muchos casos sin agua y con el riesgo de contraer coronavirus y/o dengue.
Por lo pronto, la justicia resolvió a través de un fallo que la administración de Horacio Rodríguez Larreta “debe garantizar el acceso al agua a todos los habitantes de la ciudad en igualdad de condiciones”.
Según consigna el portal “Nueva Ciudad”, la resolución obliga a las autoridades “a entregar entre 150 y 300 litros de agua potable por día por habitante a cada vecino y vecina” de los barrios populares de la ciudad que no tengan acceso al agua de red o donde éste se vea interrumpido.
Asimismo, se les dio un plazo de cinco días hábiles para “elaborar un plan de contingencia consensuado con la comunidad de cada barrio y con cronograma de entrega de agua a granel”.
? La Villa 31 y la Villa 1-11-14, las más golpeadas por el coronavirus: allí se concentran la mayoría de los casos
