El centenar de bares notables que actualmente se mantienen con vida en la Ciudad de Buenos Aires tendrán, de ahora en más, beneficios impositivos para que su existencia no corra peligro.
El aumento de tarifas, la crisis económica y el “cansancio” de sus viejos dueños derivaron en una serie de cierras durante el último tiempo: tal es el caso, por ejemplo, de la Confitería Richmond, en la peatonal Florida del microcentro, y el Bar El Chino, de Pompeya.
A partir del mes de enero entró en vigencia la “Ley Tarifaria” porteña, que reduce el porcentaje que se percibe por Ingresos Brutos del 3% al 1,5% para los cafés, bares, billares y confiterías con un alto valor histórico, patrimonial y cultural declarados como “notables”.
“Teníamos una ley que ya nos beneficiaba, pero con un monto que era exiguo. Por eso la reducción del 3% al 1,5% en Ingresos Brutos nos viene muy bien a los bares notables. Hay que tener en cuenta que se trata de edificios antiguos, históricos y que el mantenimiento siempre corre a cuenta del propietario. Y además, no escapan a la situación de la gastronomía“, señaló Felipe Evangelis, presidente de la subcomisión de “Bares Notables de la Cámara de Cafés y Bares” de la AHRCC y dueño de El Viejo Buzón, del barrio de Caballito, en diálogo con Clarín.
“Hay una tarea importante en defensa de la identidad de la ciudad y el apoyo a la cultura. Porque somos emprendimientos privados, pero colaboramos con la política cultural de la ciudad. Para recibir la declaración de notables, hay una evaluación sobre la incidencia en su zona, no sólo por ser históricos, sino por ser emblemáticos en sus barrios”, remató.
☕️ ¡LOS BARES NOTABLES DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES!