Luego de semanas de descontento y de quejas formales, finalmente el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA) cedió a las quejas de los taxistas.
Las autoridades porteñas decidieron incorporar un “índice dinámico de congestión” a las tarifas prestablecidas que se cobran en el Aeroparque “Jorge Newbery”.
“Se trata de una evolución en el cálculo de la tarifa. Ahora, el costo final del viaje tendrá en cuenta el impacto de la congestión en la calle. El valor del ticket dependerá del día y del horario en que se inicia el viaje”, indicaron desde la Secretaría de Transporte porteña.
De ahora en más, quienes reserven un viaje desde los “tótems” del aeropuerto lanzados a mediados de marzo para evitar abusos, verán un incremento en el costo del servicio.
Probablemente el mismo mecanismo sea extendido en el futuro a las terminales de Ezeiza, Buquebus, y Retiro.
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