El presidente se mostró enojado en una reunión de gabinete ampliado que tuvo lugar este jueves en el Centro Cultural Kirchner (CCK), ante más de mil funcionarios entre ministros, secretarios, gobernadores, intendentes y legisladores oficialistas.
“Cada vez estoy más convencido del camino que hemos tomado, pero también quiero decirles que estoy caliente, por si no lo notaron”, disparó sorpresivamente Mauricio Macri.
“Siempre me calentó la mentira y otra vez escuchar a los que vienen a proponer ese maravilloso atajo. Es inaguantable, no lo puedo soportar más. Son muchos años de tirar gigantescas oportunidades por la ventana”, agregó.
“Dicen que esto se arregla creciendo, ¿y quién no quiere crecer? Cuesta mover las estructuras, cuesta correr a los estafadores que han adquirido privilegios a partir de trabar y hacer todo complejo. Eso es una batalla, la damos con alegría y soñamos con que esas personas se conviertan”, prosiguió ante la atenta mirada de sus compañeros de espacio y gobierno.
“Lo que estamos haciendo no es en vano. A los predicadores del escepticismo les digo que no es verdad. Acá están pasando cosas realmente importantes, que van a generar que lo que somos capaces de crear se desarrolle acá”, apuntó luego.
Y remató: “Estamos acá por lo más maravilloso que hay en este mundo, que es el amor. Porque realmente amamos al prójimo y queremos ayudarlo. El amor es la fuerza más potente que podemos tener entre nosotros. (…) Hagámonos cargo de decirles a los argentinos: ‘¡Es por acá!’. Hay que poner el hombro, hay que remar un poco más, no se sale de un día para el otro. Sin llorar, pero convencidos de que estamos en el lugar correcto y en la hora indicada. Porque somos una generación que vino a cambiar la historia para siempre”, concluyó.