La pelea por la permanencia en Primera está que arde. A diferencia de otros campeonatos, donde los equipos que perderían la categoría estaban casi definidos, faltando pocas fechas para el final de la Superliga ningún conjunto tiene el “boleto” comprado para la B Nacional, y hay muchos que todavía no pueden respirar aliviados.
El gran responsable de esta situación es Tigre, quien parecía condenado y comenzó a dar señales de vida. La llegada de Néstor Gorosito al banco del “Matador”, lo inyectó de confianza, y logró dos victorias consecutivas: el viernes superó a Patronato por 2 a 1. De esta manera, Tigre quedó a cinco puntos del primer equipo que se salva del descenso, San Martín de San Juan. El conjunto sanjuanino hoy puede agrandar la diferencia frente a Newells.
Belgrano, en tanto, empató sin goles ante San Lorenzo y mantiene la tendencia de esta Superliga: le cuesta mucho ganar, aun de local. Argentinos y Gimnasia, que vienen cayendo, aun están por encima de la zona de descenso.
San Martín de Tucumán, que ayer cayó ante River en el Monumental, está por ahora último en la tabla, pero como divide su promedio por menos partidos jugados, una buena racha final lo mantendrá en Primera.
Quedan 15 puntos en juego y dentro de los últimos siete equipos de la tabla de Promedios, cuatro perderán la categoría. Pero muchos de ellos, aunque se salven este año, repetirán el calvario la próxima Superliga, porque otra vez comenzarán con baja calificación.
? Por: Mateo Lezcano