Las cinco medidas de fuerza que realizaron los gremios aeronáuticos en el mes de noviembre por el no cumplimiento de la cláusula gatillo y las suspensiones a los trabajadores que llevaron adelante las asambleas terminaron por elevar la tensión con las autoridades a niveles inesperados.
Como medida de seguridad en el marco del #G20, la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) habilitó a miembros de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) y de la Fuerza Aérea a desempeñar funciones en plataforma y prestar servicios de rampa.
Ahora, pese a que la cumbre terminó el último sábado, decidieron prorrogar la medida que debería funcionar solamente “ante la prestación de circunstancias excepcionales que así lo requieran”.
¿Qué implica esto? Que si los gremios realizan otra medida de fuerza, las autoridades podrían disponer de efectivos de las fuerzas de seguridad para cumplir algunas de las funciones y, de esta manera, no se paralizarían por completo los aeropuertos.