La recesión económica y la inflación galopante se siente en los bolsillos de los consumidores y se traslada a los números en rojo de los comercios.
Según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), las ventas minoristas cayeron un 9,4% en octubre, en relación a igual mes del año pasado.
Ya son diez meses consecutivos en declive, lo que suma un 4,9% en lo que va del 2018. Las datos negros no terminan ahí: la medición arrojó que todos los rubros relevados bajaron en la comparación anual.
“Todos los rubros que componen la canasta minorista tuvieron caídas muy fuertes en un mercado que vendió lo justo y necesario. La gente controló mucho el gasto con tarjetas y le escapo incluso a las cuotas sin interés por las altas tasas punitorias cuando se paga solo el mínimo. Aunque entre la opción de abonar en un solo pago o en más de uno sin interés, siempre se eligió a plazo”, señalaron en el informe.
“Las tasas de financiamiento de las tarjetas de crédito son exageradamente altas lo que está resintiendo mucho el consumo, se nota el miedo de los consumidores a endeudarse“, agregó, por su parte, Alberto Juan Mazzoni, prosecretario de la Federación de Centros Comerciales a Cielo Abierto de la Ciudad de Corrientes.
- Informe: CAME