El equipo de Guillermo Barros Schelotto tiene el objetivo en la mira: quiere ganar la Copa Libertadores de América cueste lo que cueste y todos los pasos los da en esa dirección.

Los refuerzos, el sistema de juego, la presión de los hinchas y la decisión de los jugadores hacen que Boca parezca implacable: el conjunto “xeneize” fue más que Cruzeiro en la “Bombonera”, ganó 2 a 0 y quedó mejor parado para el partido de vuelta.

Gracias a los goles de Mauro Zárate y Pablo Pérez podrá ir con mayor tranquilidad a Belo Horizonte y afrontar con algo más de calma el “superclásico” ante River Plate.

La única mala: Esteban Andrada sufrió una fractura de mandíbula tras el violento choque con Dedé en el segundo tiempo y estará afuera de las canchas por dos meses. Agustín Rossi lo reemplazará en el arco.

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