La devaluación del peso, la galopante inflación y la preocupante situación económica no hicieron que el gobierno de Mauricio Macri “recule” en los aumentos sobre las tarifas de gas y luz.
Ni la salida de Juan José Aranguren logró frenar la escalada del costo de las facturas: desde que Javier Iguacel ocupó su lugar se encargó de remarcar que los precios están “atrasados” y que los incrementos en las boletas seguirán llegando.
“Que den respuestas…” cantan los trabajadores en el Ministerio de Energía. #BastaDeTarifazos pic.twitter.com/Fj263Vv7z7
— Sindical Federal (@SindicalFederal) 23 de agosto de 2018
Este jueves, trabajadores de cooperativas, empresas y fábricas recuperadas decidieron tomar pacíficamente el edificio del Ministerio de Energía en forma de protesta.
Hace un mes y medio atrás, la Federación Gráfica Bonaerense, el sindicato de Obreros Curtidores, FEDECABA, FETRAES, FACTA y MNER habían presentado un petitorio con tres puntos: frenar los cortes por falta de pago, establecer una tarifa diferencial y anular las deudas contraídas con las empresas de servicio. Nunca recibieron respuestas por parte de las autoridades.
Teniendo esto en cuenta, advirtieron que no se irán del lugar y que mantendrán la ocupación hasta que alguien se acerque a recibir sus reclamos y a dialogar sobre posibles soluciones.