Lourdes Espíndola fue baleada en el peaje Quintana, a quince metros del Acceso Oeste, mientras esperaba el colectivo que la llevaría hasta Berazategui: luego de dispararle en el cuello, los delincuentes sólo se llevaron su arma reglamentaria.
Este martes velaron los restos de la policía de 25 años con la presencia de sus familiares y un gran número de agentes de Policía Bonaerense. El cuerpo fue llevado luego al cementerio Parque Municipal de Berazategui.
Fernando Altamirano, el esposo de la víctima, habló sobre lo ocurrido ante la prensa: “Somos humanos, no somos robots. En nuestro trabajo estamos acostumbrados a ver óbitos todo el tiempo y por ese lado nos ponemos un poquito fríos, pero cuando es para uno cambian las cosas”.
Tras pedirle perdón a Fabián Perroni, mandamás de la fuerza, así como también a Mauricio Macri y María Eugenia Vidal, señaló: “Voy a trabajar desde el lado de adentro de la policía para ayudar a mis compañeros, a los ciudadanos y para que cambiemos todas estas cosas. En la marcha del 18 de agosto vamos a estar y vamos pedir que se legalice que si mataste a una persona, no tenés más derecho“
