Cuando el teléfono de Inés Zorreguieta sonó muchas veces pero no atendió, su amiga se asustó: al llegar a su departamento en el barrio porteño de Caballito encontró un cuadro desolador. La hermana de la Reina de Holanda, Máxima Zorreguieta, estaba sin vida.
Según los investigadores policiales y su entorno, todo indica que se trató de un suicidio ya que en el departamento no hay indicios de que hayan estado otras personas y la joven de 33 años atravesaba un grave cuadro de depresión.
En la misma dirección van los primeros testimonios recogidos en la causa judicial, que se encuentra a cargo del juez de instrucción Fernando Caunedo y de la fiscal Cinthia Oberlander.
El cuerpo fue trasladado a la Morgue Judicial, donde especialistas del Cuerpo Médico Forense le realizarán la autopsia.