Los problemas políticos y religiosos dominan la agenda mediática en torno a la Selección Argentina a poco menos de dos semanas del inicio del Mundial de Rusia 2018.

El enojo, primero de los palestinos, se trasladó a la Iglesia Católica: el conjunto “albiceleste” decidió no visitar al Papa Francisco en el Vaticano, algo pactado desde hace un tiempo atrás.

En horas de la mañana, el vocero papal, Greg Burke, les comunicó a los periodistas acreditados que mañana se realizaría el encuentro entre el sumo pontífice y la delegación argentina. Sin embargo, un rato después tuvo que dar marcha atrás.

Desde la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) alegaron que no podían asistir por “cuestiones logísticas” y recordaron que recientemente decidieron reprogramar y adelantar el viaje a Israel.

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