Un tiroteo en pleno centro porteño despertó del letargo de la media tarde a los cientos de transeúntes, comerciantes y trabajadores que estaban en la intersección de la Avenida Corrientes y Paraná.
Tres ladrones asaltaron a una joyería de la zona de Libertad y Lavalle; mientras escapaban, distintas unidades policiales empezaron a perseguirlos, lo que derivó en decenas de tiros, gritos y corridas en pleno centro.
Según las primeras informaciones brindadas por la Policía de la Ciudad, la jueza laboral María Alejandra D’Agnillo, titular del Juzgado Nacional Primera Instancia del Trabajo N° 63, recibió dos disparos en las piernas.
Por su parte, el secretario del Juzgado Civil n° 9, Ezequiel Allende, también fue impactado por una bala en el pecho; otro transeúnte más fue atendido por un impacto de bala. Los tres están fuera de peligro.
Uno de los delincuentes, Carlos Alberto Antequera, fue herido con un balazo y se debate entre la vida y la muerte. Previamente había estado involucrado en al menos cinco hechos delictivos, todos por robo: en 2010 le unificaron una condena a cinco años y 10 meses de prisión.
Varios comerciantes de la zona decidieron cerrar sus puertas luego de lo sucedido, especialmente por los rumores en torno a que los perpetradores del robo podrían estar escondidos o buscando lugares para esconderse.
Luego se supo que uno de los delincuentes se escapó corriendo por Avenida Corrientes y que el otro logró cambiarse de ropa en el edificio de la Procuración. La policía los busca intensamente.
