La Asociación de Prensa Extranjera en Hollywood celebró la 75° edición de los premios “Globos de Oro” en el distinguido hotel Beverly Hilton de Los Ángeles marcado por un clima distinto, de época, que impregnó la ceremonia.
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A diferencia de otras oportunidades, la alfombra roja estuvo esta vez teñida de negro: algunos actores y fundamentalmente las actrices eligieron ese color para su look como forma de protesta en contra de las casos de abuso en Hollywood y así manifestaron su apoyo a la campaña “Time’s Up”.
Esta busca incentivar a las mujeres a hablar sobre este tema y ponerle fin al acoso sexual: del movimiento participan, por ejemplo, Reese Witherspoon, Ashley Judd , Eva Longoria , America Ferrera , Natalie Portman , Emma Stone , Kerry Washington y la productora Shonda Rhimes.
El discurso de Oprah Winfrey fue sin duda el momento más álgido, encendido y emotivo de la noche: comprometida con la campaña #MeToo (“Yo También), recibió el galardón Cecil B. DeMille por su trayectoria y ponderó la fuerza de las mujeres para enfrentar estas situaciones.
“Llegó un nuevo día para todas las niñas y mujeres víctimas de abusos sexuales. Lo que sé por cierto es que hablando su verdad es la herramienta más poderosa que tenemos. Es la dedicación insaciable por destapar la verdad la que nos impide girar la cara a la corrupción y la injusticia”, disparó.
“I want all of the girls watching here now to know, that a new day is on the horizon.” @Oprah accepts the 2018 Cecil B. de Mille award. #GoldenGlobes pic.twitter.com/hbquC1GBjm
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“Quiero reconocer a todas las mujeres que sufrieron abusos y siguieron adelante porque tenían, al igual que mi madre, hijos que mantener, cuentas que pagar y sueños que perseguir”, agregó.
Tras contar la historia de Recy Taylor, una mujer negra que en 1944 denunció haber sido violada por un grupo de hombres blancos, remató: “Y cuando ese día finalmente llegue, será gracias a todas esas mujeres magnificas, muchas de las cuales están en esta sala esta noche, y muchos hombres bastante fenomenales, que habrán luchado duro para convertirse en los líderes que nos llevarán al tiempo en el que ya nadie más tenga que decir #MeToo”.
Nicole Kidman, también vestida íntegramente de negro, agradeció a sus compañeras de elenco, Reese Witherspoon, Shailene Woodley, Zoë Kravitz y Laura Dern por el premio y espetó: “Somos leales unas a otras y esto es para compartir. ¡Vamos las mujeres!. Mi personaje habla sobre el abuso, y espero que a medida que contamos estas historias, se pueda visibilizar y cambiar el curso de las cosas”.
