La situación promete ser tan complicada como la que se registró hace un año: el fuego avanza en Mendoza y La Pampa con focos de incendio en el Bosque Andino Patagónico y más de 300 mil hectáreas que ya fueron arrasadas por el fuego.
Según confirmaron desde el Ministerio de Seguridad, a cargo de la problemática luego que decidieran quitarle al Ministerio de Ambiente la potestad en el tema, el escenario no es alentador: en suelo mendocino los fuertes vientos hacen que sea haga mucho más difícil extinguir los focos, sumado a las altas temperaturas y la poca humedad del suelo.
Colaboramos con aviones del Servicio Nacional del Manejo del Fuego, helicópteros y cuadrillas especializadas para combatir los incendios en #Mendoza y #LaPampa. Seguimos presentes, trabajando junto a las provincias. pic.twitter.com/2RDTOrGh6z
— Ministerio Seguridad (@MinSeg) 8 de enero de 2018
“Venimos combatiendo incendios desde hace diez días. El primero se registró en el Cerro Arco, luego tuvimos focos en el Valle de Uco y los últimos fueron en General Alvear. Logramos mitigar diez de los ocho que se presentaron. La complicación en el sur fueron los vientos”, señaló el titular de la Secretaría de Ambiente de Mendoza, Humberto Mingorance.
Los focos de incendio activos en suelo mendocino están en el paraje de Monte Comán, en el departamento San Rafael, y los parajes Línea de Goyco, Gaspar Campos, Ovejería y Corral de Lorca, en el departamento de General Alvear.
La situación es bastante similar en La Pampa, donde ya se quemaron más de 157 mil hectáreas, tal cual informó el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA): los ganaderos realizan “picadas” para que las llamas no ingresen a sus campos y no crezca la mortandad de animales.
Según el director de Defensa Civil de La Pampa, Luis Clara, la situación mejoró en suelo pampeano: el único foco de incendio que queda es dentro del Parque Nacional Lihué Calel, del cual el fuego quemó ya un tercio.