Rafael Nahuel, de 22 años, tenía su casa a metros de su hermano y sus padres en el Alto de Bariloche. El no era militante mapuche pero una rama de su familia paterna sí. La semana pasada se había ido a acompañar a su tía y a su prima, en la comunidad mapuche del Lago Mascardi, luego del desalojo del jueves: el sábado encontró la muerte.

La autopsia realizada al cuerpo de joven confirmó lo que sus amigos y familiares denunciaron desde un primer momento: fue asesinado por la espalda por un efectivo del “Grupo Albatros” de la Prefectura Naval Argentina.

Tal como publicó “Socompa”, fuentes de la causa “confirmaron que el proyectil alojado en el tórax de Rafael es una 9 milímetros, compatible con las utilizadas” por dicha fuerza de seguridad.

Vale la pena recordar que el crimen se dio en el marco de un operativo de Prefectura en terrenos de la comunidad Lafken Wuinkul Mapu, en las inmediaciones del Lago Mascardi, cerca de Bariloche.

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