En su frente abierto para lograr que todos los gobernadores suscriban a la reforma tributaria, el gobierno de Mauricio Macri dio otro paso adelante.
Este lunes, las autoridades nacionales llegaron a un acuerdo con la gobernadora de Tierra del Fuego, Rosana Bertone, con la anuencia de empresarios “fueguinos” nucleados en la Asociación de Fabricantes Argentinos de Terminales Electrónicas (AFARTE) y dirigentes de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM).
Firmamos con el Gobierno Nacional, la UOM y AFARTE un acuerdo que deja sin efecto la eliminación inmediata de los impuestos internos a los productos electrónicos que no se fabriquen en Tierra del Fuego pic.twitter.com/QAcIgVnvRU
— Rosana Bertone (@RosanaBertone) 13 de noviembre de 2017
¿En qué consiste el mismo? Pactaron reducir progresivamente los impuestos a los productos importados electrónicos: el año que viene la alícuota bajará del 17% al 10,5% y se continuará bajando hasta llegar a un 2% en 2023. Además, se congelarán los salarios por dos años. ¿Y qué consiguió a cambio la mandataria provincial? Que no haya despidos ni suspensiones en ese lapso.
Del encuentro participó el titular del Ministerio del Interior, Rogelio Frigerio; el del Ministerio de Producción, Francisco Cabrera; y el del Ministerio de Hacienda, Nicolás Dujovne. Por la UOM se hizo presente, Antonio Caló y el secretario general de la UOM de Tierra del Fuego, Oscar Martínez.
Este último, al explicar cómo se dieron las negociaciones, fue bastante gráfico: “Nos hicieron como el chiste del preso al que le dicen que lo van a matar si no acepta el dunga-dunga y bueno, tuvimos que aceptar el dunga-dunga”.
