“Uno de los soldados de Estado Islámico atacó a un número de cruzados en una calle de la ciudad de Nueva York”, puede leerse en un artículo publicado en el último número del semanario “jihadista” “al Naba”.

Así, un par de días después del atentado, finalmente el Estado Islámico (ISIS) reconoció su autoría: en el hecho murieron ocho personas, cinco de las cuales eran argentinas.

En el bolso y la camioneta del atacante, Sayfullo Saipov, se hallaron “tres cuchillos y celulares con miles de imágenes de propaganda y unos 90 videos con combatientes del Estado Islámico arrollando prisioneros con un tanque, decapitándolos y disparándoles en la cara”.

“Por la gracia de Alá, la operación infundió miedo en el cruzado América, incitándolos a incrementar las medidas de seguridad e intensificar acciones contra inmigrantes en América”, concluyeron en la publicación.

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