En medio del conflicto por la detención de Milagro Sala y la resolución de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que instó a que la liberen o le den prisión domiciliaria, el gobernador jujeño volvió a salir a la carga.
“La CIDH hace una proclama política y se mete en la vida de algunos países, en particular del nuestro, termina jugando un rol político, es parte de una facción política“, sentenció Gerardo Morales en diálogo con AM 880.
En esta misma línea, y haciendo alusión a cómo estaba la provincia antes de que él asuma, explicó: “Hay que terminar con el clientelismo y la corrupción; son los ejes que nos mueven para trabajar en Jujuy. El gobernador Fellner estaba pintado y era cómplice de todo lo que pasaba”.
Por último, Morales también contra la CGT por la movilización del último martes: “Tienen una actitud más confrontativa que dialoguista. El dato más importante de las PASO es la ratificación del cambio”.