El pedido del fiscal federal Carlos Stornelli desató un terremoto político en la Cámara de Diputados: la idea de desaforar y detener a Julio De Vido encontró eco en los pasillos legislativos.
Luego de semanas de especulaciones comenzó finalmente a funcionar la comisión de Asuntos Institucionales, presidida por Pablo Tonelli del PRO, en donde se discuten cuatro proyectos para excluir al ex titular del Ministerio de Planificación durante el kirchnerismo,
La intención de los legisladores que se desempeñan en la Cámara Baja es desaforarlo por “inhabilidad moral”: según trascendió a la prensa, ya hay acuerdo entre “Cambiemos”, el “Frente Renovador” y parte del peronismo bajo la conducción de Diego Bossio para poder llevar el debate al recinto.
Para que esto ocurra, el oficialismo tendrá que conseguir el dictamen de mayoría y, tras ello, contar con dos tercios de los presentes para que finalmente Julio De Vido no sea más miembro del cuerpo.
El actual diputado, por su parte, decidió no concurrir al debate y presentó un descargo previo: allí aseguró sentirse “víctima de una de las persecuciones más sistemática, injusta y meticulosamente organizada”.
“Quiero señalar que nunca he sido condenado por delito alguno, que ninguno de los temas que me imputan se relacionan con comportamientos funcionales propios del desempeño del cargo de ministro que ejercí desde mayo del 2003 hasta diciembre del 2015 y tratan en general, sobre el conocimiento que pude o no haber tenido o sobre la sospecha de comportamientos disfuncionales de otros funcionarios o en cuestiones relacionadas con decisiones políticas sobre temas complejos, que están lejos de haber sido completamente investigadas o aclaradas”, remató.
