El gobierno de Donald Trump alertó en las últimas horas que ha identificado “posibles preparativos” del régimen del presidente sirio, Bashar al Asad, para “lanzar un nuevo ataque con armas químicas en ese país”.

A través de un comunicado, el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, precisó: “Las actividades son parecidas a las preparativos que hizo el régimen antes del ataque con armas químicas del 4 de abril”.

“Como hemos dicho anteriormente, Estados Unidos está en Siria para eliminar al Estado Islámico. Sin embargo, si se lleva a cabo otra matanza masiva utilizando armas químicas, Bashar Al Asad y sus militares pagarán un alto precio”, señalaron.

Vale la pena recordar que Siria se comprometió en 2013 a entregar todo su armamento químico en el marco de un acuerdo con Estados Unidos y Rusia: el transcurso de los años y distintos acontecimientos terminaron demostrando que esto no ha sido así.

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