Hace algunos meses atrás, cuando la primer ministra británica decidió llamar a elecciones anticipadas en función de obtener un triunfo rotundo para demarcar la cancha al laborismo y, fundamentalmente, a los conservadores de su propio partido de cara a las negociaciones por el #Brexit, nunca imaginó estar en esta situación.
We cannot and must not pretend that things can continue as they are when it comes to Islamist extremism. These 4 things need to change: pic.twitter.com/e7bGtYxq2U
— Theresa May (@theresa_may) 6 de junio de 2017
A un día de los comicios generales, varias encuestas dan una paridad inusitada entre Theresa May y Jeremy Corbyn, minando su autoridad aunque finalmente termine obteniendo un triunfo holgado.
El ataque terrorista en Londres, sumado al del “Manchester Arena”, dejaron tambaleando a la primer ministra en lo que respecta a materia de seguridad. Por ello, uno de sus últimos movimientos fue endurecer su discurso antiterrorista.
?? Corbyn contra May: “Hay que destinar recursos continuamente para mantener a la gente segura” https://t.co/RIi7TRYfc2 pic.twitter.com/nqg5w8U2gl
— Diario BA (@diariodeBA) 6 de junio de 2017
“Puedo decirles algunas cosas que haremos: mayores sentencias a prisión para aquellos que fueron condenados por ofensas terroristas. Le haremos más fácil el trabajo a las autoridades para que puedan deportarlos a sus países”, apuntó May.
“Impondremos mayores restricciones a la libertad y al movimiento de los sospechosos de terrorismo, especialmente cuando tengamos evidencia de que pueden ser una amenaza pero no tanta como para juzgarlos en la corte. Y si las leyes de derechos humanos nos impiden hacerlo, entonces cambiaremos las leyes”, remató.