El choque entre el conjunto “xeneize” y el “Globo” anticipaba emociones: los locales necesitaban ganar para alejarse del descenso y la visita sumar de a tres para escaparse de sus perseguidores en la punta del campeonato.

El partido, tal como se preveía, arrancó con intensidad: tanto Huracán como Boca tuvieron un par de chances para ponerse arriba en el marcador en el primer cuarto de hora.

Sin embargo, con el correr de los minutos, la iniciativa del local comenzó a apagarse y los dirigidos por Guillermo Barros Schelotto, pese a intentar con un poco más de ahínco por los laterales, no lograron lastimar a la defensa “quemera”.

Los primeros veinte minutos de la segunda parte estuvieron en la misma sintonía que el tramo final de la primera: Huracán tratando de profundizar en tres cuartos de cancha pero impreciso en los últimos metros y Boca dependiendo de la inspiración de Gago para conectar al resto del equipo con los delanteros.

Cuando no pasaba nada en el partido y, para colmo, Angulo se perdía una chance clara frente al arquero “xeneize”, apareció Benedetto, como siempre, para salvar a a la visita: el “9” aprovechó un mal despeje y, en la única pelota que le había quedo frente a Marcos Díaz en toda la noche, convirtió el 1 a 0.

En el último minuto de descuento, cuando todo parecía perdido, el árbitro vio penal del “1” de Boca sobre el “Rolfi” Montenegro, desatando la ira del equipo visitante. El “Kaku” Gamarra fue el encargado de darle la pelota desde los doce pasos y de igualar el partido.

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