El Jefe de Gabinete, Marcos Peña, se refirió a la posibilidad de que la central obrera realice una medida de fuerza en los primeros días de abril.
“No hay que dejarse llevar por las voces que quieren que fracase el cambio, que necesitan que fracase el cambio, empezando por Cristina Kirchner porque necesitan discutir otras cosas en otros lugares. Desde el primer día demostraron ese rechazo profundo a la voluntad democrática de los argentinos”, disparó desde la Casa Rosada.
“Eso puede explicar algunas las actitudes de muchos dirigentes que se abrazaban entre ellos y que ni asumieron una autocritica por los problemas que dejaron, ni están aportando soluciones constructivas. Por suerte son una minoría. El camino del cambio no tiene retorno, va para adelante porque los argentinos lo decidieron”, agregó Marcos Peña ante los presentes.
“Queremos dialogar. Pero si la propuesta es volver al pasado que los argentinos rechazaron, no hay espacio de discusión posible”, prosiguió el ministro coordinador.
“No se trata de evitar o no el paro, sino de tener un agenda con mejoras para los trabajadores. Este es el desafío que hemos planteado desde el primer día con la CGT y ha permitido avances concretos como en las discusiones por ganancias, el seguro del desempleo, la deuda con los jubilados”, enumeró.
“No tenemos dudas que en estos quince meses se avanzó en más temas concretos con la CGT que en el gobierno kirchnerista, donde solo se los convocaba para venir a aplaudir a un acto oficial. El paro no es necesario y no va a mejorar la realidad de los trabajadores al día siguiente”, concluyó.
En las últimas horas, Juan Carlos Schmid, integrante del triunvirato de la central obrera, desestimó la posibilidad de dar marcha atrás con la medida de fuerza: “En mi opinión el paro es irreversible. Habida cuenta de que ya ha pasado más de un año y no se ha acertado en los pronósticos que llevó adelante el equipo económico”.
