La violación de un joven negro en Aulnay-sous-Bois, un suburbio parisino, por parte de efectivos poiviales viene sacudiendo la tranquilidad de la ciudad.
El 2 de febrero, cuatro policías realizaron un operativo en un suburbio del norte París, parando a jóvenes que estaban en la calle y pidiéndole los documentos.
Théo fue tirado al piso mientras era requisado, le pegaron y después le introdujeron un bastón por el año: eso le costó severas lesiones y heridas que culminaron con una operación de emergencia. Por el caso hay un policía acusado de violación y otros tres que están imputados por malos tratos.
Desde esa fecha, miles y miles de personas protestaron y marcharon pidiendo justicia para el joven y exigiendo que se termine con los abusos policiales. Como suele suceder en Francia, buena parte de estas manifestaciones terminaron con autos incendiados, corridas y detenciones.
Ahora llegó el turno de los estudiantes secundarios: casi una docena de establecimientos fueron literalmente bloqueados en modo de protesta. Según confirmaron las autoridades, nueve estudiantes fueron detenidos por prender fuego dos autos y una moto.
