Correo Argentino S.A., la empresa de Franco Macri, quebró en diciembre de 2003 con una deuda millonaria: el actual gobierno aceptó una “polémica” propuesta de pago.

A los pocos días de que asumiera Néstor Kirchner en la Casa Rosada en el 2003, la empresa Correo Argentino S.A. – perteneciente al padre de Mauricio Macri – se declaró en quiebra.

El Estado era su principal acreedor por la falta de pago del canon que el “Grupo Macri” debía abonar tras hacerse cargo de la concesión del reparto de la correspondencia: tras la quiebra, el servicio volvió a quedar en manos del Estado, que volvió a repartir sobres y bultos en todo el país.

Desde ese momento comenzaron a realizarse distintas negociaciones y mediaciones para cumplir con los pagos pendientes: recién el año pasado el Estado Argentino aceptó la propuesta de pago de Franco Macri y compañía.

“El acuerdo equivale a una condonación de la deuda. Debe considerarse abusivo ya que implica una quita de más de $4.000 millones en la actualidad y de más de $70.000 millones a 2033, cuando finalice el plan de pagos”, aseveró Gabriela Boquín, fiscal general ante la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial.

“Representa un enorme perjuicio para el Estado. La familia Macri detenta la totalidad del capital accionario de Socma Americana S.A., controlante de Sideco Americana S.A., quien a su vez posee el control accionario de Correo Argentino S.A.”.

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