Al menos 30 personas quedaron atrapadas en un hotel de la localidad de Farindola, en la región de los Abruzos, tras una avalancha.

Tras una seguidilla de tormentas de nieve y temblores, un alud sepultó al hotel “Rigopiano” en las laderas del Gran Sasso, en la región de Abruzos, centro-sur de Italia: allí había entre 20 y 30 personas alojadas, incluyendo a varios niños.

“La situación es dramática, el hotel fue barrido, sólo queda un pedacito: hay toneladas de nieve, árboles cortados de raíz y deshechos. Hay colchones que fueron arrastrados por centenares de metros”, señaló Luca Cari, responsable de prensa de los bomberos que intervienen en el rescate.

“Hay muchos muertos. No hemos podido hacer demasiado todavía por las condiciones climáticas. Estuvimos llamando a las personas pero desde adentro no contesta nadie, no hay respuestas. Seguiremos cavando y buscando”, agregó.

Según el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV), la avalancha que sepultó al hotel se debió “muy probablemente a la sucesión de eventos sísmicos de más de 5 grados” originados en los últimos días en el centro Italia y que se sintieron, incluso, en Roma.

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