Desde hace algunos meses, la Dirección de Sida y Enfermedades de Transmisión Sexual dependiente del Ministerio de Salud de la Nación está sin presupuesto y prácticamente acéfala.

vih

2016 viene siendo un año negativo para los pacientes con VIH y las organizaciones que luchan día a día para prevenir el contagio y ayudar a quienes contrajeron el virus.

El doctor Carlos Falistocco, que estaba en el cargo desde 2011, renunció aduciendo “cuestiones personales” pese a que se debía fundamentalmente la falta de fondos, los crónicos desmanejos y la pobre ejecución del presupuesto para el área, situación que se viene acarreando desde, por lo menos, el 2015.

Según datos de la Dirección de Sida, en ese año el presupuesto para el VIH fue de 1.050 millones de pesos y se ejecutaron sólo 905 millones en tratamientos.

Para no modificar esta tendencia, sólo en lo que va del 2016, sólo se dio luz verde a aproximadamente el 50% del dinero que se tenía previsto desembolsar: este año el presupuesto estuvo estimado en 1.450 millones de pesos y todavía ni siquiera fueron utilizados para la compra de partidas de medicamentos.

¿Qué es lo que falta? Hay medicamentos que directamente no entran o, a lo sumo, entra una mínima cantidad y fraccionados; pañales de adultos insuficientes; medicación para problemas pulmonares y antibióticos inexistentes; a los pacientes y organizaciones se les hace imposible acceder a la medicación antirretroviral, a reactivos para test y seguimiento de pacientes VIH+ en todo el país ni tampoco cuentan con materiales para la prevención como preservativos y folletería.

vih-ii

Todos estos hechos son graves por varias cuestiones. Hace algunos meses atrás, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) volvió a hacer foco en la importancia de prevenir que más personas contraigan la infección. “Estamos haciendo sonar las alarmas. Todavía la población no se dio cuenta del poder de la prevención. Si ahora vuelven a resurgir las infecciones de VIH, la epidemia va a ser imposible de controlar. El mundo necesita urgentemente ponerse en acción”, aseguró Michel Sidibé, director de UNAids.

Para colmo, la situación de la Argentina al respecto es ambivalente: a nivel de cobertura, la situación es favorable ya que el 70% de los argentinos que viven con VIH recibe la terapia antirretroviral para controlar la enfermedad, lo que excede ampliamente el promedio global, que es del 41%. No obstante, el panorama puede complicarse rápidamente y con consecuencias gravísimas si el Ministerio de Salud no hace nada para proveer los medicamentos.

Por otro lado, un informe del Instituto para la Medición y la Evaluación de la Salud (IHME), de la Universidad de Washington, encendió las alarmas: entre 2005 y 2015, la Argentina pasó de tener 2850 nuevos casos a 6320. Aunque en el mismo período en el resto del mundo la cantidad de nuevos casos disminuyó un 0,7%, en el país aumentó un 7,8%.

rock-vida

  • Testeos y asesoramiento de #VIH:

Todos los miércoles en Coronel Pagola 3880 (alt. Av. Saenz al 300), Ciudad de Buenos Aires.

No necesitas sacar turno, solo te presentas en el día y horario de atención, y tené en cuenta que el test es gratuito, voluntario y confidencial.

Más información y consultas: info@rockandvida.com

Comentarios

comentarios