En su primera entrevista televisiva como presidente electo de los Estados Unidos, el magnate lanzó controvertidas afirmaciones en torno a los pasos que seguirá en la Casa Blanca.
“Vamos a ir por los criminales y los que tengan un pasado criminal: miembros de pandillas, narcotraficantes. A mucha de esta gente, unos dos o incluso tres millones, la vamos a sacar del país o la vamos a encarcelar”, señaló en diálogo con el programa “60 minutes” de CBS.
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“Están en el país ilegalmente y habrá que sacarlos. En lo que respecta al resto que no cuenta con documentación, cuando la frontera esté segura y todo esté normalizado veremos qué hacer”, prosiguió Donald Trump en la entrevista.
Aunque no explicó exactamente cuál es su plan, remató: “Los oficiales de inmigración vamos a determinar qué hacer con toda esta gente, que por supuesto es magnífica. Pero vamos a tener que tomar una determinación”, aclaró.
Respecto de este punto, distintos periodistas norteamericanos resaltaron que, pese a lo abultado de la cifra que estimó Donald Trump, el mismo Barack Obama deportó a aproximadamente 2,5 millones de inmigrantes sin papeles desde que está en la Casa Blanca.
