En el Estadio de Obras, y luego de cuatro años de disidencias, la Confederación General del Trabajo (CGT) volvió a unificarse.
Fueron meses de disputas, idas y vueltas: finalmente, Hugo Moyano, Luis Barrionuevo y Antonio Caló y dieron paso al triunvirato que conducirá los destinos de la CGT por los próximos cuatro años.
Cada uno pudo colocar a “su” dirigente en el trinomio: Héctor Daer (Sanidad), Carlos Acuña (estacioneros) y Juan Carlos Schmid (Dragado y Balizamiento) fueron los elegidos.
“Nos esperan momentos difíciles, creo que nos va a ser mucho más difícil sostener a través de la democracia a este Gobierno. Por eso digo que aquellos que vienen a querernos imponer medidas de fuerzas cuando recién estamos consagrando la unidad del movimiento obrero, es una falta de respeto”, aseguró Luis Barrionuevo al tomar la palabra en el acto.
? La CGT advierte: “El gobierno tiene que empezar a dar respuestas”https://t.co/697WMYYr4W pic.twitter.com/qHRb10E6M4
— Diario BA (@diariodeBA) 22 de agosto de 2016
“A pesar de las diferencias que existían hemos podido lograr el objetivo que perseguíamos: nombrar una comisión que en el futuro conduzca los destinos del movimiento obrero organizado”, agregó Hugo Moyano. A veces se anteponen los intereses personales, pero gracias a los trabajadores que han sabido interpretar los momentos históricos que atraviesa nuestro país, le hemos dado a nuestra CGT la conducción de tres compañeros que estoy convencidos por su capacidad, responsabilidad y compromiso que van a llevar adelante los destinos del movimiento obrero”.
“Entendimos que era necesario encarar en conjunto con toda la fortaleza del movimiento obrero para que quienes nos gobiernan entiendan que los trabajadores no nos rendimos ni nos van a doblegar. Al movimiento obrero no lo doblega nadie por más que quieran asustarnos”, remató el histórico dirigente gremial.
Entre los ausentes se destacan la UATRE de Gerónimo “Momo” Venegas, taxistas de Jorge Viviani, SMATA de Ricardo Pignanelli, Unión Ferroviaria, y la Asociación del Personal Legislativo.
Los gremios que componen la Corriente Sindical Federal, y que encabeza Sergio Palazzo, renunciaron por su parte a los cargos de comisión directiva de la nueva CGT unificada y se retiraron del Congreso Extraordiario.
“Tenemos diferencias en cuanto al armado y la estructura, lo que no vamos a hacer es meterle una impugnación para que el macrismo se regodee cuando se pretende impugnar un congreso de los trabajadores. Pretendemos que esta CGT unificada tome para sí lo que el plenario de secretarios generales y el documento del 29 de abril y se haga carne en cada uno de nosotros. Mientras los dirigentes discutimos, el gobierno generó más desempleo, una inflación de más del 40% y concentración de la economía”, apuntó el líder de los bancarios.
