El equipo “albiceleste” se llevó la primera edición del clásico Argentina -Brasil en los Juegos Olímpicos de Río 2016.
El partido, más allá del color aportado por la histórica rivalidad, era importante para poder conseguir la clasificación a los cuartos de final y para evitar un potencial cuarto lugar en la tabla y jugar con Estados Unidos en la otra ronda.
El primer cuarto fue favorable para el equipo argentino, sobre todo gracias a los triples del “Chapu” Nocioni. Pero el segundo, sin embargo, fue todo del conjunto local: los brasileños empezaron a meter todo lo que tiraban al aro mientras que Ginóbili y compañía no lograron hacer pie, teniendo muchas pérdidas en ataque y errores en defensa.
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— CABB (@cabboficial) 13 de agosto de 2016
No obstante esto último, la característica de la “Generación Dorada” nunca fue rendirse fácilmente: en el tercero logró achicar la distancia entre ambos y llevar el partido peleado hasta lo último.
En el cuarto, un rebote magistral capturado por Campazzo y un triple del “Chapu” Nocioni lograron igualar el encuentro en 85 puntos y llevarlo a tiempo suplementario.
El primer alargue dio paso al segundo y allí la Argentina mostró todo el temple: sin Scola por la acumulación de faltas, el equipo creció en los momentos oportunos gracias a Campazzo y se llevó el partido por 111 a 107.