Los investigadores cuestionaron las políticas del kirchnerismo y del macrismo: “Debe haber una distribución socialmente más equitativa”.
Hay una normalización de la marginalidad. Tenemos un sistema regresivo de la distribución de los ingresos.
— ODSA – UCA (@ODSAUCA) 12 de agosto de 2016
Según un informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (UCA), en la Argentina hay 13 millones de pobres: un 29% de los argentinos se ubicaban bajo la línea de pobreza en 2015, ese número saltó al 32,6% en abril.
El ajuste, la devaluación y el “tarifazo” no fueron moco de pavo: entre diciembre y abril último, la cantidad de pobres aumentó en un 1,4 millón y que “más de 400 mil personas se sumaron a la indigencia”.
? El segundo semestre, con despidos y pocas mejoras: 15 mil personas perdieron su trabajohttps://t.co/cNvKl5t02r pic.twitter.com/N4i4njVlYH
— Diario BA (@diariodeBA) 8 de agosto de 2016
“Los programas sociales fueron un buen cinturón de seguridad. Esta masa de segmentos de clase media baja o sectores populares constituyen los ‘nuevos pobres’ que emergen de medidas normalizadoras adoptadas por el actual gobierno”, enfatizó el sociólogo Agustín Salvia, al frente del Observatorio de Deuda.
“El actual escenario fuertemente inflacionario contribuiría a la formación de una nueva capa de pobres. En este marco, cabe preguntarse si son suficientes y están llegando a tiempo las medidas de alivio social adoptadas para los sectores más pobres”, prosiguieron.
“Es factible que el Gobierno necesite ganar tiempo para que la economía comience a crecer y para generar confianza en que un futuro distinto es posible; sin embargo, muy poco se logrará si no hay una distribución socialmente más equitativa de los costos del ajuste”, añadió.
? “Más pobres y más contaminados”https://t.co/Z1OJO9eF0m pic.twitter.com/ZxDX68t0hg
— Diario BA (@diariodeBA) 12 de agosto de 2016
¿Qué son los “nuevos pobres” de los que habla la investigación?
“Cabe llamar la atención en que el mayor riesgo social no sólo lo están experimentando los segmentos de la población más vulnerables que dependen de la ayuda social, sino también los millones de hogares que fundan su subsistencia en trabajos precarios, pequeños comercios y trabajadores eventuales”, se lee en el informe.
Todos ellos, además de carecer de visibilidad y representación política no han sido objeto de una especial protección social frente a la actual fase de caída del consumo, aumento de los precios y mayor riesgo de despido o caída de la actividad. Un segmento al cual no llegan los aumentos por paritarias, ni las tasas de interés favorables, ni las tarifas sociales, ni el salario familiar, ni los aumento en los programas sociales, etc”, explicaron.
Para acceder al informe completo: “Tiempo de balance: Deudas sociales pendientes al final del Bicentenario”